Tuesday, October 31, 2006

Cuando una mujer dice no estoy enojada, lo está (Poema)

No estoy enojada contigo.
No te preocupes por nada.
Has dejado varias cosas claras.

Tu corazón es tuyo
y el mío es sólo mío.
Es imposible que ambos,
latan a un unísono.
No tienen porque reír y llorar juntos,
ni compartir o escucharse.
Tu corazón, como la mayoría de los corazones,
busca su alegría propia.
Mariposea de aquí para álla,
aspira a cazar la felicidad.
Déjame a mí con el mío
y dile a tu corazón:
“mil y una gracias por esta lección”.
Porque en estos días de sombras,
melancolías
y penas,
la ausencia de su presencia,
me ha hecho aferrarme a Dios.
Y gracias a tu egoísta corazón,
el mío encuentra su rumbo,
se recupera a sí mismo
y se llena de valor.

When my professor of Creative Writing asked me to describe a bathroom, I wrote this:

Two muscular, blonde guys in their twenties pulled me out of the truck. They tried to carry me as cautiously as they could; yet, I came an inch from the floor. I didn’t break into pieces ‘cause my owner came running on time. He saved me and helped the construction workers put me where I belonged, the bathroom. And so began my life as a mirror, out of Sears and into my new house, Carol’s first apartment.
Carol is twenty-eight years old. He is worried about getting bold; I see him checking himself out too often on my surface. Maybe he is not so worried and just plain conceited. By the long, wide openings of hairs I see above his forehead, I would be worried if I were him. The truth is: he and I spend less time together than I spend with the toilet paper, the towels, and the rest of the bathroom. I only see him for fifteen minutes, the time it takes him to shave, brush, flush and comb twice a day.
The rest of the day, I’m surrounded by white walls, an even whiter ceiling and very shiny, white marbled floor. All the objects and surfaces around me smell like Windex and Mistolin. I smell of Windex myself, if I must say that for the record. A lady with her hair tight in a black, thick ponytail cleans me every two weeks. The scenery around me begins to change, we all start getting dirty again. Little hairs accumulate in the bathtub and thin layers of dust hoard in the corners, around the toilet and behind the door.
Today is one of those days. Bottles of Calvin Klein, Armani, Curve and Dolce and Gabbana are unevenly lined up on the silver shelf above the toilet. The bottle of Zegna is half opened, as if someone had used it, but had left in a hurry. A box of cutips stands next to the cologne bottles and then, there is a yellow candle, inside its container of course. By the candle lays two boxes of matches, one read Macarena and the other Chispas. Then, in the floor, to the right hand side of the toilet stands a container of magazines.

Degas' The Tub
Jessica Alba can be seen in the cover of Maxim, wearing light blue panties, exhibiting her belly button and barely covering her upper body with a white shirt. Jessica Alba’s picture in the cover of Maxim is not as dominant as the painting of a woman taking a shower that hangs on the wall right across from the toilet. It’s probably one of Degas. The pervert painter who paid prostitutes so he could see them taking a shower after a tiring days at work. If one is sitting on the toilet and doesn’t want to go through the pages of Men’s Health and Maxim, there is Degas’ painting, right in front of your face. Someone wasn’t looking at the painting, but at the magazines ‘cause there is a page folded as if someone had interrupted his reading. The article in Men’s Health has a big headline that reads: “More Sex, Fewer Strings”.
Further to the right, in the bathtub, bottles of Herbal Essences’ shampoo and conditioner are unevenly lined up. Of course there is also an Axe bottle. Since Axe came out with the commercial in which Nick Lachey is walking around the city and counting with a clicker how many girls hit on him because he smells like Axe, the company has probably double their sales. Talk about the power of advertisement. The bathroom’s owner was no exception; he went ahead and bought the gel.
I am just what I am, a bathroom mirror in a single guy’s apartment.

Wednesday, October 25, 2006

Trozo de otro poema del 2004


Pablo Ruiz Picasso "El Guitarrista Viejo" durante lo que se le consideró su período azul (1901-1904).
Deshacer lo vivido
y descantar lo cantado,
y como todo ello es imposible
y de ser posible sería en vano.
Echo al mar las cenizas de lo que quedó de mí,
después de mi primer amor y tras aquel verano;
pero al notar que no quiero perder esas cenizas,
no las echo al mar,
y son ellas las que se escapan de las manos
.

Tu risa (Poema)

David Hockney, A Bigger Splash, 1967

(Al igual que en el poema, la figura se perdió tan pronto cayó a la piscina. Así de repente y más de imprevisto, desapareció la sonrisa del poema.)
Un poema escrito en mayo de 2005

Extraño tu risa-manantial
que estallaba de repente,
sin mesura ni excusas,
grosera y estrindente.
Extraño tu risa-descarada,
la de choferes y amigotes.
Tu risa de un juego de billar,
chiste picante y vaso de cerveza.
Extraño tu risa-mar,
la suave y tibia
que en tus ojos parecías saborear
y en tu boca reflejar.
Extraño tu risa de marinero cansado,
de rebelde sin mesura,
hombre con pasado y
niño solitario sin padre.
Extraño tu risa-sol,
la risa que te nacía al mirarme,
o al susarrarme al oído,
que hiciera algo malo.
Extraño aquella risa-sol que me calentaba el alma
y enfriaba los miedos.
La risa que me contagiaba con su alegría
y me hacia tan infinitamente,
feliz...
La extraño...

El final de un poema que escribí en el 2004


(Fotógrafa: Yo misma, durante un paseo por la orilla del mar.)

De ser por mí me quedaría aquí,
en la exacta fase en la que estoy.
En la paz que me da vivir a la sombra de tu recuerdo.
Satisfecha con el amor que hallo en tu nombre.
Alegre de oír la música que te gusta,
leer todos los libros que me recomendaste y
escribirte las cartas y poemas que no me atreveré a darte.
Y es que mi vida así,
con tu sutil presencia,
con todo lo que en mí dejaste,
es mejor que mi vida con tu total ausencia.

Por qué no nos volvemos mudos? (poema)


(Poema que escribé en agosto del 2005 )

No intentemos decirnos lo que sentimos.
No intentemos traducir a palabras lo vivido.
No intentemos descifrar lo que pasa,
cuando nos miramos en silencio,
te busco desde lejos, o
te hablo sin palabras.
Seamos mudos,
no definamos lo nuestro porque existen ya
demasiados títulos, estatutos y conceptos;
se han exhausto las palabras de tanto uso en vano,
de darle tan poco valor y significado.
Lo nuestro es fresco, nuevo, recién hallado.
Dejémoslo así,

en un renglón en blanco,
en las teclas del computador que no pulsé,
en las letras que no dije, ni escribí.
En el espacio que se crea entre tu cuerpo y mi cuerpo antes de un beso.
Si lo ubicamos ahí, podremos añadirle y quitarle todo y cuánto deseemos.
De ese modo lo dejaremos libre de ser,
ser sí mismo,
crecer y ser.